Venezuela vive problemas realmente excepcionales, pero cuando se observan desde una perspectiva global con que el sociólogo Carlos Portillo analiza estos fenómenos contemporáneos, caemos en cuenta en que, además, surgen preguntas que son más comunes de lo que suponemos.
De su análisis brotan interrogantes que en cualquier país podrían considerarse de contradictorias si se toma en cuenta la legalidad estructural de los Estados.
Durante la entrevista, que concedió desde su casa de Tampa, estado de la Florida, las preguntas volvían con respuestas cargadas de una importante alabanza sobre el rol que lleva a cabo la sociedad civil, relacionadas al escenario electoral del venidero 28 de julio.
Dr. Portillo, ¿cuáles son esas preguntas que, de acuerdo a su análisis, se hace el venezolano hoy día?
Las preguntas que están en boca del electorado venezolano y del mundo en general son las siguientes: ¿Respetará el régimen de Nicolás Maduro los resultados de las elecciones en Venezuela? ¿Qué caminos seguir en la ruta hacia la búsqueda de la libertad de Venezuela?
¿…y cuáles son las respuestas?
Tenemos que comenzar por entender la base en la que se sustenta la legitimidad del poder político del actual régimen en Venezuela. Max Weber decía que el poder político es percibido como legítimo cuando éste es obedecido mayoritariamente. Cabe entonces preguntarnos, ¿está el actual régimen gozando de una credibilidad para mantenerse en el poder? Indudablemente que no. El poder del Gobierno en Venezuela se ejerce mediante el miedo, la represión y el cercenamiento de los derechos civiles, pero no en base a la credibilidad y obediencia de los ciudadanos.
Esto nos permite decir que ante la presencia de una autoridad gubernamental carente de legitimidad ante la sociedad civil, el fraude electoral del régimen comenzó mucho antes del 28 de julio del presente año, con la inhabilitación de María Corina Machado; después con no permitir la inscripción de Corina Yoris, con los retrasos en el registro electoral, con el robo de las tarjetas electorales de los partidos y con los impedimentos para que los venezolanos sufraguen en el extranjero. A eso se le suma la detención de dirigentes del partido Vente Venezuela y con los obstáculos para que MCM y el candidato de la oposición, Edmundo González Urrutia, puedan hacer libremente su campaña sin ningún tipo de inconvenientes.
¿El papel de la sociedad civil ante este escenario que usted describe?
Cultivar conciencia colectiva alado del liderazgo de MCM, logrando transformarse en un binomio capaz de convertir las amenazas, en oportunidades para el contacto directo con el pueblo, quien ha logrado con el mensaje de esperanza y confianza de MCM, una oportunidad para salir de esta tiranía.
¿Qué antecedente en la historia, similar a esto, le viene a la memoria?
Este contexto histórico nos permite recordar a Seneca cuando le dijo a Nerón: “Tu poder radica en mi miedo, ya no te tengo miedo, por lo tanto, tú ya no tienes poder”. Hoy las acciones de la sociedad civil se han convertido en colectivas, desafiando con su resistencia ciudadana una autoridad que ya es percibida como ilegitima, donde el revelarse no se convierte en un derecho, sino en una obligación y compromiso de la sociedad civil.
¿Qué otras acciones gozan de su repudio?
Lo nunca antes visto en los procesos electorales, donde el pueblo, y no los partidos marca la dirección de las acciones a seguir, como por ejemplo el caso de las hermanas Hernández en su puesto de empanadas Pancho Grill en Corozo Pando, Calabozo, que por vender desayunos a MCM y su equipo de trabajo, el castigo del régimen fue cerrarlo. El caso de la persecución de los lancheros que transportaron a MCM ante el bloqueo de las vías en el estado Apure; y así otros hechos más que muestran la irreverencia de una sociedad civil que está harta de todo aquello que tenga que ver con socialismo.
¿Cómo contextualiza el mensaje de MCM para el pueblo, para la sociedad civil?
El liderazgo de MCM y la madurez por ésta alcanzada como político, ha permitido entender, que la misión de la sociedad civil el 28 de julio y después, es el de actuar como garante defensor y protector del voto. El movimiento social que se ha conformado debe estar organizado y preparado para enfrentar las trampas y posible fraude que el régimen, apoyado por un CNE, tratarán de desconocer contra la decisión de la mayoría electoral. Por lo tanto, con observación o sin observación internacional, el mensaje de MCM ha sido que somos los venezolanos ante todo los que vamos a defender nuestros derechos ante cualquier escamoteo y fraude.
Pero para ello debe haber una estrategia, una acción acompañada de organización.
MCM y los partidos han enfatizado es sus estrategias para defender y proteger el voto opositor con lo que conocemos como Comanditos y el plan 600K, compuesto de una legión de 600.000 ciudadanos formados y coordinados para asistir en el proceso de las elecciones ante los inconvenientes que se esperan presente el CNE y los retrasos que se esperan del Gobierno para entorpecer el voto opositor.
También es importante que los miembros de mesa conozcan al detalle el manual del Registro Electoral para responder con propiedad y argumentos ante las posibles trampas que intentará el régimen con sus representantes.
¿Cuál sería el papel de la Fuerza Armada?
El rol de las Fuerza Armada es importante: debemos tener en cuenta que, aunque se espera una posición neutral y plegada a la Constitución, no puede soslayarse, que dentro del estamento militar existen algunos sectores de las cúpulas militares que podrían continuar adeptas al régimen por su complicidad en la conservación de prerrogativas que le aseguran su continuidad en el gobierno. Otros podrán mostrarse en pro de un cambio a consecuencia del desprestigio de la institución y del deterioro de vida que viven ellos y sus propios familiares; y un tercer grupo que jugarán un papel de indecisos y su pronunciamiento dependerá del desarrollo de los acontecimientos.
Los factores geopolíticos y las relaciones de la tiranía con regímenes dictatoriales, socialistas y terroristas del mundo, es un factor a considerar por su participación en apoyo de la dictadura para preservar sus intereses.
Para concluir: ¿Cómo ve usted las figuras, tanto de MCM como la de Edmundo González?
Son una luz de esperanza para un país que reclama el inicio de un nuevo ciclo histórico donde se recobre la institucionalidad y retorne la libertad y justicia, y donde pueda emprenderse un nuevo contrato social que regule las relaciones sociales y los derechos civiles del ciudadano sean respetados. Como diría Aristóteles: “El que supere sus miedos, será verdaderamente libre”.
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