ESTÁ JUGANDO CON UN LIGAMENTO ROTO EN EL PULGAR
Luis Arráez reveló este viernes que la molestia que tenía en su dedo pulgar, que le impidió estar en el Juego de Estrellas y ha tirado hacia abajo su averaje es qué está jugando nada menos con una rotura de ligamento desde hace más de un mes.
«Tengo un ligamento roto, pero eso no me impide jugar”, dijo Arraez a la prensa apostada en el estadio de los Marlins. «Ya saben el amor que tengo por el beisbol y mi trabajo. Ha sido difícil jugar así, especialmente bateando».
ALuis Arráez no le importa para nada si es designado o primera base. Él lo que quiere es jugar y salir a jugar todos los días y ganar la corona de bateo. «Esta competencia (por el liderato de bateo) es más ruda. Ustedes saben que a mí me gusta la presión, la competencia. Todos los días salgo a sonreír en el terreno ya que este deporte es bien difícil».
LUIS ARRÁEZ NO NECESITA CIRUGÍA
Arráez fue informado de que no necesita una cirugía para sanar su ligamento del pulgar izquierdo y eso lo pone muy contento, le contó a TheAthletic.com. Sin embargo, afirmó que no piensa abandonar la competencia.
Arraez se lastimó el pulgar cuando se lo golpeó mientras se deslizaba en la tercera base el 25 de junio. No participó en el siguiente juego y desde entonces ha sido titular en 28 de 31 juegos, 10 de ellos como bateador designado.
En ese lapso, el primer bate del equipo promedia .280 con OBP de .300 y una tasa de elevados por encima de sus tendencias típicas de bateo de línea.
«Yo solo quiero mantenerme saludable, seguir dando mis hits y llévame otro título (de bateo) con el favor de Dios», contó en la rueda de prensa que dio a los periodistas hispanos reunidos en el dugout de los Padres. «La pelota es rendonda y muchas cosas pueden pasar. Hoy estoy líder bate, mañana puede ser otro muchacho, pero esperemos el final»
Para el venezolano es un reto jugar para los Padres de San Diego, equipo que lucha por pasar a la postemporada.
«Estar en un equipo ganador es muy importante tanto en lo profesional como en lo personal. Aquí todos aportamos nuestro granito de arena y eso es lo que necesitamos los peloteros, ganar y ganar. Y aprovechar las oportunidades que ellos (los Padres) me dan», contó el yaracuyano.
«He vivido muy intenso la rivalidad Padres-Dodgers. Es como un Caracas-Magallanes. Las dos fanaticadas son difíciles y cuando tienes fanáticos así es muy bonito vivir esa rivalidad», le contó Luis Arráez a los colegas en español, antes del juego.
El Emergente.-
FOTO: @Padres
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